jueves, 9 de junio de 2016

Filled Under:




“Amados hermanos, pensamos que tienen que estar al tanto de las dificultades que hemos atravesado en la provincia de Asia. Fuimos oprimidos y agobiados más allá de nuestra capacidad de aguantar y hasta pensamos que no saldríamos con vida. De hecho, esperábamos morir; pero, como resultado, dejamos de confiar en nosotros mismos y aprendimos a confiar solo en Dios, quien resucita a los muertos."         2 CORINTIOS 1:8-9 (NTV)

Ninguno de nosotros está exento del sufrimiento. Todos experimentamos soledad, desaliento, malos tratos y la crítica injusta. ¿Por qué Dios permite que estas cosas nos pasen a nosotros? Porque Dios está desarrollando el carácter de Cristo dentro de nosotros, y para hacer eso, debe llevarnos a través de las circunstancias de la vida por las que Jesús pasó.

¿Sufrió Jesús? ¿Jesús estuvo solo? ¿Fue tentado a sentirse desanimado? ¿Fue incomprendido, difamado y criticado injustamente? ¡Claro! ¿Significa esto que Dios causa tragedias? No. Dios es bueno. No causa el mal ni hace el mal. Pero Dios puede usar tiempos oscuros y estresantes para tu bien.Él los utilizará para enseñarte a confiar en Él: "dejamos de confiar en nosotros mismos y aprendimos a confiar solo en Dios." (2 Corintios 1:9).

Él los utilizará para mostrarte cómo ayudar a los demás: "el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios." (2 Corintios 1:4 RVR).

Y Él los utilizará para acercarnos más a otros creyentes: "y ustedes nos están ayudando al orar. Entonces mucha gente dará gracias porque Dios contestó bondadosamente tantas oraciones por nuestra seguridad." (2 Corintios 1:11).

Entonces, ¿cómo puedes esperar lo mejor de Dios cuando estás pasando por momentos difíciles?: En fe, te niegas a ser desalentado, sabiendo que Dios está para ti. . En fe, crees que Dios está contigo y haciendo las cosas para tu bien. . En fe, confías en la protección y guía de Dios.

¿QUÉ ESCUCHASTE? ¿Qué te dijo Dios cuando leíste hoy la Escritura y el devocional? ¿QUÉ PIENSAS? ¿Cómo aplicas esto en tu vida?

¿QUÉ VAS A HACER? No solo escuches la Palabra. Sé un hacedor de la Palabra (Santiago 1:22).

AHORA HABLA CON DIOS. Esto es donde cambias tus pensamientos a oraciones. Pueden ser oraciones de gratitud o alabanza. Pueden ser oraciones de confesión o peticiones para que Dios te ayude. Tú decides. Toma un minuto para escribir la respuesta que Dios te dio en oración.

0 comentarios:

Publicar un comentario