“Confía en el Señor con todo tu corazón, no dependas
de tu propio entendimiento. Busca su voluntad en todo lo que hagas, y él te
mostrará cual camino tomar”.
PROVERBIOS
3:5-6 (NVI)
Cuando te apoyas en algo, estás
confiando en que resistirá. Cuando te apoyas en el Señor, estás diciendo,
"Tengo fe en que Dios es lo suficientemente fuerte para sostenerme".
Dios le dijo a Josué, "Nadie podrá hacerte frente mientras
vivas. Pues yo estaré contigo como estuve con Moisés. No te fallaré ni te
abandonaré". (Josué 1:5 NTV). Y Dios dice que es igual para ti.
Mientras Josué se apoyaba en Dios, él era invencible. Josué logró lo imposible
en probabilidades increíbles, porque él dependía del Señor.
¿En quién o en qué te estás apoyando para
tener fuerza? ¿Te apoyas en la aprobación de otras personas? Es una base muy
débil. La gente te va a defraudar. Nadie te puede sostener todo el tiempo.
Finalmente, se van a cansar y te vas a caer.
No te fíes de ti mismo. ¿Has notado cómo a
menudo te caes? Todo el tiempo te haces promesas a ti mismo, las cuales no
cumples. ¿Qué puedes hacer?
"Confía en el Señor con todo tu corazón, no dependas de tu propio
entendimiento. Busca su voluntad en todo lo que hagas, y él te mostrará cual
camino tomar." (Proverbios
3:5-6 NVI). El apoyarse en el Señor puede dar miedo. A veces es incómodo. Puede
hacer que te preocupes, "¿Dios va a venir? ¿Va a sostenerme?"
Por eso se requiere fe en el
Señor. Tienes que creer que Su mayor interés es tu corazón, tienes que confiar
en Él, aun cuando no entiendas y tienes que moverte hacia adelante, tienes que
estar convencido que Él te mostrará el camino correcto.
Cuando haces esto, vas
a descubrir, "Cosas que ojo no vio, ni oído
oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los
que le aman."1 Corintios
2:9 RVR).
¿QUÉ ESCUCHASTE? ¿Qué te dijo Dios cuando
leíste hoy la Escritura y el devocional? ¿QUÉ
PIENSAS? ¿Cómo aplicas esto en tu vida?
¿QUÉ
VAS A HACER? No solo escuches la Palabra. Sé un hacedor
de la Palabra (Santiago 1:22).
AHORA
HABLA CON DIOS. Esto es donde cambias tus
pensamientos a oraciones. Pueden ser oraciones de gratitud o alabanza. Pueden
ser oraciones de confesión o peticiones para que Dios te ayude. Tú decides.
Toma un minuto para escribir la respuesta que Dios te dio en oración.
0 comentarios:
Publicar un comentario